CÓMO PAGAR MENOS EN LA DECLARACIÓN DE LA RENTA

¡Extra, extra! La declaración de la renta ya está aquí.

¿No te habías enterado? ¿Es que no ves los telediarios ni lees los periódicos?

¡Ya estás tardando en descargarte los datos fiscales y el borrador!

Porque estamos de suerte, nuestro organismo de la Administración favorita cada año tira de base de datos para facilitarnos nuestros datos fiscales e incluso se remanga a mandarnos un borrador de la declaración. No hay duda de que todo esto ayuda, pero tampoco hay que fiarse. Un borrador es sólo eso, un borrador, no tiene por qué ser definitivo ni mucho menos correcto.

En realidad el borrador está pensado para ponerte las cosas más fáciles, no para hacerte todo el trabajo. Siempre cabe la posibilidad de que haya errores un omisiones de las que tú serás el único responsable. Así que para evitar disgustos mejor que lo revises con cuidado.

Lo primero que debes tener claro es que en el borrador vendrán los datos básicos pero no habrá ni rastro de las deducciones que te ayudarán a pagar menos o recibir mayor devolución. Abre bien los ojos, estoy segura de que este post te ayudará con tu declaración de la renta.

Principales reducciones y deducciones en IRPF 2014

Modalidad de tributación

¿Individual o conjunta? esa es la cuestión. Hacienda envía el borrador en la misma modalidad que la declaración del año anterior, pero cada año tienes la posibilidad de optar por declaración individual o conjunta en función de lo que más te interese. La declaración conjunta supone un incremento del mínimo personal y familiar que te beneficiará en caso de que uno de los cónyuges haya tenido pocos (o ningún) ingreso.

¿Has tenido un bebe?

Entonces debes incluir este dato en la declaración para comunicárselo a Hacienda y poder aplicar los beneficios fiscales que te correspondan. Durante los primeros tres años de vida de tu retoño, el mínimo personal y familiar a deducir será mayor y podrás aprovechar las deducciones autonómicas existentes. Además, las madre trabajadoras pueden aplicar la deducción por maternidad, cuando cumplan los siguientes requisitos:

     – Tener hijos menores de tres años

     – Realizar una actividad por cuenta propia o ajena

     – Estar dada de alta en el régimen correspondiente de la Seguridad Social:

• Régimen General de la Seguridad Social para las empleadas por cuenta ajena
• Régimen Especial de Trabajadores Autónomos para las empleadas por cuenta propia) o Mutualidad obligatoria.

Esta deducción se puede ejercer al presentar la Declaración de la Renta (1.200 €/año) o solicitar el cobro anticipado a razón de 100 €/mes. Si quieres saber más, entérate en este artículo sobre la deducción por maternidad que publiqué hace unos meses.

¿Te has separado o divorciado?

Siguiendo con las cuestiones familiares, en caso de separación o divorcio las pensiones compensatorias a favor del cónyuge sirven para reducir la base imponible del pagador. Esto quiere decir que el cónyuge pagador se puede deducir las cantidades pagadas al cónyuge perceptor, de manera que es como si este dinero no lo hubiera ganado. El perceptor, por su lado, debe declarar las cantidades cobradas como rendimiento del trabajo.

Aportaciones a planes de pensiones

Sigue siendo una de las maniobras que más contribuye a reducir la factura tributaria. Estas aportaciones funcionan de tal modo que es como si el dinero aportado no lo hubieras ganado. Eso sí, en el momento de rescatar el plan de pensiones el importe cobrado tributa en el apartado de rendimientos del trabajo como si lo hubieses ganado ese año. Esto puede contribuir a que el tipo medio de gravamen se dispare y te toque pagar a Hacienda más de lo que tenías pensado.

Cuotas a sindicatos y colegios profesionales

Son un gasto deducible a restar de los rendimientos del trabajo. Nunca vienen en los datos fiscales ni en el borrador y es fácil olvidarse de ellos, pero sirven para pagar menos.

Donativos

Ser solidario te ayuda a pagar menos impuestos. Dependiendo de la entidad a la que entregues tus donativos, podrás aplicarte una deducción del 10%, del 25% o del 30%. Los donativos a entidades religiosas y a ONGs sí suelen venir incluidos en el borrador y los datos fiscales

Deducción por adquisición de vivienda habitual

Fue la estrella de las deducciones durante mucho tiempo. Sin embargo, esta deducción no es aplicable a las viviendas adquiridas a partir del 1 de enero de 2013. Qué faena.

Eso sí, quienes compraron su casa antes de esta fecha, siguen teniendo derecho a deducirse el 15% de lo que paguen anualmente (principal de la hipoteca, intereses y seguros de vida e incendios vinculados al préstamo hipotecario) con un límite máximo de 9.040 euros anuales.

Deducción por arrendamiento de vivienda habitual

Vivir de alquiler también tiene sus ventajas. La deducción estatal por arrendamiento de vivienda habitual permite deducir el 10,05% del importe anual pagado en concepto de alquiler, siempre que la base imponible del declarante sea menor de 24.107,20 €. Esta deducción estatal es compatible con las que aprueben las comunidades autónomas por el mismo concepto.

Ahora, sabiendo esto, ya no hay excusas para pagar a Hacienda. ¡A ponerse las pilas toca!

Y tú, ¿cuáles son las deducciones que aplicas en tu declaración de la renta?